Aquí os dejo un poema que escribí cuando tenía 16 años.
Todavía recuerdo la noche en la que lo escribí...Me había pasado la tarde-noche leyendo noticias, viendo fotos y vídeos de las torturas que recibían mis hermanos saharauis de los Territorios Ocupados del Sáhara Occidental. Además de eso, me acordé de mi infancia y en las condiciones en las que vivía en los campamentos de refugiados saharauis situados en Tinduf (Argelia). Leí tantas veces que Marruecos seguía incumpliendo las cientos de resoluciones internacionales, que los saharauis estábamos en nuestro legítimo derecho de ser libres, que no habíamos incumplido nada ilegal, que nuestra lucha siempre ha sido pacífica y que aún así...el mundo nos tenía en el olvido. Sentí tanta rabia y tanta impotencia que aunque sabía que llorando no iba a conseguir nada, no me pude contener y finalmente pasó lo inevitable.
Espero poder transimitiros todo lo que sentí aquella noche: amor, nostalgia, tristeza, rabia, impotencia, olvido, esperanza, ganas de luchar...
"Yo he visto rosas en el desierto,
rosas atrapadas en un lugar muerto,
rosas heridas,
rosas acaloradas,
rosas maltratadas.
He visto rosas refugiadas
y otras muchas encarceladas.
Encarceladas por decir la verdad,
maltratadas por gente sin piedad.
Rosas divididas por un muro de espinas,
rodeado por tanques asesinos
y miles de minas sedientas.
Un muro vigilado por miles de soldados,
soldados genocidas,
gobernados por gente sin escrúpulos,
gente hipócrita y materialista,
gobernadores terroristas,
que por conseguir poder son capaces de matar
a civiles desprotegidos
y lanzarles bombas asesinas.
Bombas ilegales que escupen sangre robada,
sangre inocente.
Pero las rosas siguen creciendo en el desierto
llenas de esperanza,
luchando día a día
esperando que alguien las escuche,
esperando que el GRAN DIA llegue:
EL DIA DE LA LIBERTAD."